domingo, 21 de febrero de 2010

"Y no sentir ningún dolor es lo que duele más."
Se te fue de las manos, es así. No hay otra forma de describirlo, simplemente todo se descontroló, se desmoronó. Lo que en algún momento ignoraste, ahora ya no importa, porque está perdido. Lo único que te queda es la culpa, y los remordimientos. Eso podría haber cambiado, podría haber sido de otra manera. Pero no lo fue. Fue como hiciste que sea. Pasó como si fuera la vida de otra persona, porque dejaste que pase y no hiciste nada para detenerlo. Tal vez no pudiste, tal vez lo intentaste pero no alcanzó, y tal vez, simplemente debía pasar. Ahora no tenés el control, tu vida tomo su curso sin avisarte. No te diste por aludido a tiempo, y ahora la ves pasar por al lado tuyo, rozándote. Tu vida, la vida de alguien más, una vida ajena. Nos esforzamos porque no duela, porque las cosas no nos afecten demasiado, por no sentir. Pero cuando eso pasa, al fin te das cuenta de que ya nada vale la pena. Y el único consuelo, es creer que hiciste lo correcto.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Opiniones, cerezas y champignones.