lunes, 12 de septiembre de 2011


Efecto causa consecuencia. A buen tiempo, buen humor. A buen humor, escuchar los Beatles. A escuchar los Beatles, comprarse una remera de ellos. A comprarse una remera de ellos, usarla un día de calor. A un día de calor, ir a la plaza. A ir a la plaza, encontrarse gente. A encontrarse gente, hablar. A hablar, gastar energía y tener hambre. A gastar energía y tener hambre, tomar una cindor. A tomar una cindor, acordarse de una canción. A acordarse de una canción, darse cuenta de la proximidad de System of a down en la Argentina. A darse cuenta de la proximidad de System of a down en la Argentina, ser feliz. A ser feliz, ser feliz. A ser feliz, ser feliz. A ser feliz, ser

F E L I Z .

Ahora sí, en la ecuación de la felicidad hay una falla: tener que ir a gimnasia mañana por la mañana. Eso me pinta un panorama bastante pedorro. No tengo ganas de ir, ¿y si falto? No recuerdo si tengo faltas disponibles, o no. ¡No, no! No seas idiota, Lucía, en noviembre ya vas a querer faltar y te vas a arrepentir. Sí, voy. Definitivamente. Aunque... también hay que vivir el día a día, ¿verdad que sí? Es increíble todo lo que se puede llegar a pensar con tal de evitar una puta clase donde hacer actividad física. Bueno, entre comillas. Puta madre. Como los Beatles no hay, y que nadie me diga lo contrario. Bah, sí, soy un alma tolerante, que lo hagan, pero voy a sostener- ahora y siempre- que son lo más añjdfñajsñioaejnovjxcandfajñfioeaoirkjndñ de la vida. Y eso no es nada poco, eh. You're gonna carry that weight a long time! Turururururu. Oh yeah. Basta, basta, debo detenerme. Es urgente la necesidad de un artefacto reproductor de música. No puedo continuar viviendo de esta manera, qué raviol de moco.


ADIÓS.

(va resbalando todo como crema en la cereza)

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