domingo, 14 de octubre de 2012














La foto es considerablemente fea, pero estoy con la ídola de Liliana Bodoc. Realmente, qué mujer encantadora, es un placer inmenso poder disfrutar de su presencia y sus palabras. Y me dedicó el libro de manera muy linda, ya quiero leerlo. 
En fin, acá me encuentro otra vez escuchando temas muy copados de rock nacional. Ahora mismo está sonando Se despierta la ciudad, como que es un tema re colgado en medio del compilado, me causa gracia. Igual se la re banca. Mi profesora de política me dijo que escribía parecido a Peter Capusotto. Me dio tanta emoción que casi lloro. Y eso que era la introducción de una monografía, quién sabe donde coño vio el parecido. Ojos que no ven, corazones que no sienten, y vos que estás por venir. Hoy fue un día muy muy hermoso, en cuanto a clima digamos. Se siente tanto la primavera, ese olor a día soleado. Aunque odio saber que va a empezar el calor ese de derretirse en época de clases con el fucking uniforme. 
Ayer fui a ver a Fito, qué, pero qué lindo recital que dio. Y por supuesto, qué grande Charly, es increíble lo mucho que me llena el solo ver al gordo ahí parado. Ahora empezó Por una cabeza. Estos temas que no escucho nunca, pero me encantan. Tengo que leer mucho en esta semana y el material es de esos que sirven de somnífero, incluso siendo que me interesa y que lo disfruto. No lo puedo evitar. Quiero que publique algo el Autobiógrafo, quiero historietas para leer. Tengo ganas de que pasen estas semanas, o de sacarme al menos un poco todas las cosas que tengo que hacer de encima, porque siempre dejo todo para último momento y eso me jode. Hoy soñé con un porro superpoderoso. Ojalá fueran así. Era como uno ordinario pero... perfecto. Estoy soñando cosas muy locas por estos días. Uh, ahora los Piojos. Qué grandes. Acabo de ver un camaleón bebé (por foto, claramente) y acabo de decidir que es el bicharrajo más lindo de la creación. Aunque es probable que si viera uno personalmente me asustaría. ¡Lo mal que se vive lo bien que se está! Sé que transmito una imagen personal muy distinta a lo que en verdad soy, pero... la pucha que vale la pena estar vivo. Con eso me refiero a que por ahí la gente me ve muy seria o fría pero, mierda, se la pasa bien. Me da bronca que la gente se llene la boca hablando pelotudeces sobre lo difícil que es la adolescencia. Es decir, podés tener muchísimos problemas, pero no están relacionados un carajo con la edad. Si la pasás mal por ser adolescente, sos un gil. Quiero conocer al bebé más gordito y lindo del mundo. Dios, empieza a sonar Mi caramelo de la Bersuit. Lo tuve muy pegado estos días. Me acuerdo que cuando era chica iba en el auto con mamá, y siempre que la pasaban por la radio ella decía que no le gustaba. Por la letra le debía parecer muy... explícita para nosotros. Pero igual, creo que en esa vulgaridad esconde una dulzura enorme, una sinceridad. Esa cosa del tiempo que se pasa, la persona que se va... que aunque sigas adelante y tengas otra persona a la que incluso ames, no es lo mismo. Que es lo que le da la magia en sí, el recuerdo. El idealizar al otro. El ¿qué hubiera sido? Cambio a toda esta familia por un segundo por vos. Esa frase me come la cabeza cada vez que lo escucho. Hay canciones que después de un poco de dolor o resentimiento, por qué no, tienen otro significado. Debería ir a dormir, mañana debería despertarme para estudiar. Pero... "debería". Cada vez que uso comillas, más cuando las uso tan al pedo como recién, me acuerdo del personaje de Capusotto agarrándole las comillas al cheto y doblándole los dedos. Estas ganas borrachas de volverte a ver. Me duele mucho el cuello la puta madre. 


Bueno, chau. 

1 comentario:

Opiniones, cerezas y champignones.