"Para que triunfe el mal, sólo es necesario que los buenos no hagan nada."

El gran y eterno dilema. ¿Hacer lo fácil, o lo correcto? Son nuestras decisiones las que nos definen como personas, y estas, siempre nos llevan a dicha pregunta.

¿Seremos castigados por caer en la tentación? ¿En lo inmoral? ¿Seremos mal vistos e incluso excluidos? Estas son las preguntas que nos hacemos. Preguntas superficiales que solo se concentran en buscar la aprobación de los demás. Lo único que buscamos es tener la conciencia limpia. Pero creemos que eso lo lograremos ante la mirada de los otros. Pero la única realidad, es que sólo uno tiene esa capacidad. Solo uno puede determinar si lo que hizo era lo correcto. Y si lo hacemos, que no sea para complacer a los demás, para ser o parecer alguien decente y confiable. Hagamoslo por nosotros. Hacelo por vos, hacelo por vos.

"Aunque estés solo, no debes decir ni hacer nada malo. Aprende a avergonzarte más ante ti que ante los .......demás."